Así se expresó durante la recorrida realizada ayer por las instalaciones del Centro Industrial de Mercedes-Benz, ubicado en el partido bonaerense de La Matanza, en el marco de un trabajo mancomunado de coordinación pública y privada, para intercambiar experiencias sobre producción, industria y circuitos logísticos con el objetivo de continuar trabajando en una nueva cultura vial con políticas públicas sostenibles que cuiden el ambiente y la seguridad en el transporte de pasajeros y carga.
Meoni dialogó con las autoridades y operadores de la compañía, como también trabajadores y estudiantes del taller acerca de las oportunidades de mejoras en materia de transporte e infraestructura, la relevancia de la seguridad en el transporte de pasajeros a partir del uso de tecnología aplicada.
Asimismo, conoció diferentes zonas de la planta industrial como las líneas de producción del utilitario Sprinter, y visitó el sector donde funciona Remain, la unidad de la empresa destinada a la manufacturación de piezas (motores y cajas de velocidad) de camiones y buses, que tiene impacto positivo en el ambiente, ya que reduce la contaminación por descarte.
Por su parte, el presidente de Mercedes-Benz en la Argentina, Manuel Mantilla, declaró estar “muy contentos y agradecidos por la visita del ministro Mario Meoni”. Además del ministro Meoni y el presidente de Mercedes-Benz Mantilla, estuvieron presentes Sebastián Efisin -responsable por el negocio de buses-; Peter Gierse- director de planta de vans; Glaucia Silva -directora de la producción de camiones y buses-; Diego Tyburec -director de RRHH-; Raúl Barcesat -máximo responsable del negocio de camiones y buses en Argentina-.
El Centro Industrial Mercedes-Benz de la localidad de Virrey del Pino posee un Polo Educativo, que incluye la Escuela Técnica y el Centro de Formación Profesional Smata, con capacidad para más de aproximadamente 3.300 alumnos, que, desde su creación en 1962, es su gran nexo de relacionamiento con la comunidad local y zonas aledañas.