Según el matutino Ámbito Financiero, para la Nación, con esta posición se termina el conflicto que nació en enero de este año, cuando se le ofreció el traspaso a Macri, éste lo aceptó, para luego arrepentirse en febrero. A partir de allí, comenzó un problema que aún no tiene solución.
Como el Gobierno nacional descarta que su proyecto de Presupuesto para 2013 se aprobará sin mayores problemas entre octubre y noviembre de este año, todo será responsabilidad de Macri desde el primer día del próximo año. Lo que desaparecerá concretamente, en la comparación con 2012, es la partida por unos $ 720 millones necesarios para manejar el servicio durante este ejercicio, al menos hasta la negociación salarial que aumentaría el costo hacia mediados de año, informó el diario.
En noviembre del año pasado, el Gobierno nacional llamó a Macri a negociar el traspaso, a lo que accedió el Gobierno porteño. Hubo una primera reunión ese mes en el despacho del ministro de Planificación, Julio De Vido, y luego un acuerdo que se firmó en enero. Macri subió el precio del boleto de $ 1,10 a $ 2,5 (un 127 por ciento) con el argumento de que el dinero acordado no incluía las obras de mantenimiento ni futuras inversiones. El jefe de Gobierno porteño afirma hasta hoy que en las actuales condiciones no puede manejar el servicio ante el peligro inminente de accidentes graves. Para el Gobierno ya da lo mismo. Desde enero próximo, ya no subsidiará los subtes.
El matutino también explica que si esto se concreta y Macri tiene que aceptar el manejo de los subtes, el traspaso ad hoc trae otro problema grave para el jefe de Gobierno. Además de la necesidad de contar con unos $ 400 millones extras para mantener los trenes funcionando y otro tanto para obras básicas, el Gobierno porteño tendrá por primera vez que sentarse hacia abril de 2013 con los famosos metrodelegados. Los representantes de los trabajadores de los subterráneos aseguran que 2013 será el año de su debut definitivo como únicos y avalados negociadores de los aumentos salariales y mejoras de las condiciones laborales de estos operarios. Los metrodelegados afirman además que, según su criterio, es Macri ya el único responsable, con lo cual será quien tenga que firmar el acuerdo salarial al que se llegue.
