A partir de hoy, el Gobierno autorizó un incremento del 4 por ciento y dejó sin efecto el congelamiento en el precio de los combustibles anunciado tras las PASO. El motivo de la suba es la volatilidad del valor del petróleo y la insistencia de empresas y provincias petroleras.
Las petroleras disponen a partir de hoy de un aumento de 4% en el precio de los combustibles, tras la autorización otorgada ayer por el Gobierno a raíz de la volatilidad internacional del precio del petróleo que hacía insostenible el congelamiento dispuesto tras las elecciones primarias.
La resolución de la secretaría de Energía establece que “durante la vigencia del decreto 601/2019 las entregas de petróleo crudo efectuadas en el mercado local deberán ser facturadas y pagadas al precio convenido entre las empresas productoras y refinadoras al día 9 de agosto de 2019, aplicando un tipo de cambio de referencia de $49,30 por dólar, equivalente a un 5,58% de incremento sobre el valor de referencia vigente, y un precio de referencia BRENT de US$ 59 por barril“.
De esta manera, las empresas podrán incrementar los precios en surtidores luego de último aumento del 1 de julio, cuando quedaron como precios de referencia la nafta súper $43,71; nafta Infinia $50,43; diesel 500 $40,94 e Infinia diesel $47,92, según los valores de YPF en la ciudad de Buenos Aires.
La decisión comunicada ayer hoy por la Secretaría de Energía implica una nueva revisión del congelamiento dispuesto mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia 566, por el cual se fijó desde el 15 de agosto un congelamiento de precios del crudo y de los combustibles por 90 días.
Tras el reclamo de las provincias y las empresas productoras y refinadoras, que incluso se tradujo en distintas medidas cautelares ante la justicia, el gobierno hizo una primera flexibilización al liberar a las petroleras la posibilidad de fijar los precios mayoristas y el viernes dispuso transferir un subsidio de $116,10 por barril de crudo.
Las acciones judiciales ante la Corte Suprema de Justicia en el caso de las provincias petroleras, o del fuero federal por parte de la petrolera Vista Oil & Gas y de los productores de biocombustibles, y un escenario de inseguridad jurídica a las inversiones que requiere Vaca Muerta sumaron argumentos a las cuestiones técnicas que en los últimos días anticipaban la medida.
El Gobierno informó el decreto de congelamiento de los combustibles del 2 de septiembre habilita a la Secretaría de Energía a “dictar los actos que resulten necesarios para ir normalizando los precios del sector con el fin de proteger al consumidor y sostener el nivel de actividad y el empleo”.
A raíz de las circunstancias previstas en la norma, la Secretaría entendió que las mismas “se vieron notablemente afectadas a partir del incremento del precio del petróleo que derivó del ataque sufrido por las infraestructuras petroleras de Arabia Saudita”.