Según el funcionario, "los salarios se están pagando normalmente y no hay ningún inconveniente con la cuestión salarial, más allá de que pueda haber un día de atraso" y agregó que "no hay ningún riesgo de cobro de salarios" para esos trabajadores. "A este nivel de intolerancia de los dirigentes gremiales no le podemos buscar otra explicación que no sea que el paro esconde otros motivos", aseveró Ramos.
En ese sentido, añadió que la medida de fuerza "encarna otra disputa gremial, otros motivos que están lejos de los intereses de mejorar el ferrocarril y tener en cuenta el interés de la gente". En tanto, el secretario defendió la gestión que viene realizando el Ministerio del Interior y Transporte en materia ferroviaria. "Acá nadie puede negar el esfuerzo del Estado, todo lo que estamos haciendo con el ministro (Florencio Randazzo) por decisión de la Presidenta (Cristina Fernández Kirchner). Estamos trabajando permanentemente con hechos concretos", sostuvo.
Por último, aunque reconoció que "no están las cosas como uno quisiera", afirmó que "nadie puede discutir que se está trabajando e invirtiendo muchísimo dinero en obras que tienden a mejorar el servicio y que en muy poco tiempo se van a ver".
