Los controles realizados por los agentes abarcaron 180 yates y veleros ubicados en cuatro guarderías náuticas y amarraderos del partido de General Pueyrredon, Mar del Plata. Así, de los botes que se encontraban en club Náutico de Mar del Plata, el club de Motonáutica, el Yacht Club y el Centro Naval, surgió que un 70% no había sido declarado ante la Provincia.
El director de ARBA Martín Di Bella aseguró a La Capital que “los dueños de estas embarcaciones deportivas son personas de evidente capacidad contributiva que, en vez de pagar los impuestos como cualquier vecino decidieron no declarar sus barcos para eludir sus obligaciones tributarias”.
Desde la agencia informaron a La Capital, que de los amarres verificados en Mar del Plata casi el 100% pertenecen a contribuyentes bonaerenses, a diferencia de los que pueden estar en el puerto de la Ciudad de Buenos Aires que pueden tener sus navíos declarados en Uruguay y encontrarse ocasionalmente en el país.
Para este operativo ARBA puso en acción a 130 agentes pertenecientes a la Subdirección Ejecutiva de Fiscalización y Servicios al Contribuyente del organismo, y se desarrollaron principalmente en Tandil y Mar del Plata, aseguró La Capital.
Además de estos controles, los inspectores notificaron deuda tanto en Tandil como en Mar del Plata a contribuyentes morosos que, en conjunto, debían alrededor de 5 millones de pesos en concepto de diferentes impuestos bonaerenses. Uno de estos deudores intimados adeudaba 170 mil pesos de Impuesto Inmobiliario y era, a la vez, propietario de un barco que nunca había sido registrado ante el fisco.
En Tandil
En cuanto a las construcciones sin declarar, sólo en Tandil se detectaron 45.146 metros cuadrados que no habían sido registrados por sus dueños ante el catastro provincial. Entre ellos, se encontraban dos edificios nuevos que, pese a estar terminados, todavía figuraban como terrenos baldíos, asegura El Diario. En tanto, también estaban en la misma condición dos propiedades ubicadas en barrios cerrados de esa localidad serrana.
La labor fiscalizadora de ARBA se extendió también a los puntos de venta informal. En Tandil, los inspectores controlaron la “Feria Mercantil”, un paseo de compras ubicado en la Cava de la Movediza que tiene más de 200 puestos comerciales. Allí comprobaron que el 70% de los locales estaba al día con sus obligaciones fiscales, mientras que el resto se encontraba en infracción, ya sea porque no habían presentado en tiempo y forma la declaración jurada, registraban deudas, o directamente carecían de inscripción en el régimen tributario sobre los Ingresos Brutos.
