Las ventajas logísticas del puerto de Santa Fe son innegables. Es la terminal portuaria más mediterránea de la Argentina con salida segura al océano a través de la hidrovía. El gran paso está por darse. Tras varios años de estudios y preparativos, hoy está cerca de ser realidad el llamado a licitación para el proyecto ejecutivo y concesión de una nueva terminal sobre el río Paraná, llevada adelante por el gobierno de la provincia, informó El Cronista Comercial.
“Este puerto es estratégico, dentro del Plan Portuario Nacional. Ya solicitamos a la Dirección de Inversión Pública del Ministerio de Economía de la Nación, la inclusión de una partida superior a los $125 millones destinada a la construcción del puente ferrovial de acceso a la nueva terminal. Esta suma duplica la previsión actual en el presupuesto 2014 y además será actualizada en el 2015”, señaló el subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la Nación, Horacio Tettamanti. El funcionario, se acercó a Santa Fe en respuesta a una invitación del directorio de la Bolsa de Comercio local. A la reunión, llevada a cabo en la sede bursátil, también asistieron autoridades de las instituciones que componen la Mesa de Entidades Productivas.
El cambio
En la oportunidad, Tettamanti se refirió a la necesidad de una reforma portuaria de segunda generación, que incluya una normativa complementaria a la existente; un nuevo régimen para la Marina Mercante nacional. Para tal fin, adelantó que la presidenta tiene un DNU a estudio. Asimismo, se refirió a la reformulación de la traza de dragado en la hidrovía desde la zona Rosafé hasta el mar.
En este punto, consideró factible superar los 11 metros de profundidad del canal Emilio Mitre hacia el mar y pensar en la construcción de un puerto de aguas profundas desde la zona Rosafé hacia el Atlántico, con un escalonamiento en el calado. Tettamanti también abordó la cuestión de la ley nacional de Puertos Nº 24.093 y el decreto Nº 817, que clausura la posibilidad de asistencia del gobierno nacional a los sistemas portuarios privados, como por ejemplo la transferencia de recursos financieros para remediar el daño ocasionado a los accesos y caminos que van a los puertos desde Timbúes a Rosario.
“El Puerto de Santa Fe va por otro andarivel porque es obra pública y soslaya el decreto Nº 817”, dejó en claro. Agregó, que para la habilitación de puertos se incorporaron nuevos requisitos como el planeamiento de toda su conectividad -el concepto es concebir a un puerto como la salida de un sistema de conectividad -explicó- y respecto del de Santa Fe sostuvo que si bien está previsto en la presentación del proyecto, sería conveniente reforzar las referencias sobre comunicaciones con otras rutas y regiones. Asimismo, solicitó no caer en el debate sobre los puertos privados, ya que “éstos también cumplen una función importante”, pero los concibió como “una terminal de un proceso de producción integrado”.
En cambio, a los puertos públicos los evaluó como “instrumentos estratégicos para maximizar la oportunidad del agregado de valor y salida de la producción de las economías regionales”. “No los concebimos sin la presencia del Estado y de la actividad privada (la comunidad organizada, aclaró), en un diálogo constructivo”. En este marco, sostuvo que “había que reconocer al Puerto de Santa Fe como una estructura logística nacional” por su influencia y proyección, y “en él, debería haber -dijo- una fuerte presencia del Estado nacional”, además de la provincial.
Salida de Bolivia al Atlántico
El trabajo para la reactivación del Puerto santafesino que se lleva adelante desde hace un tiempo, nuevamente suma alternativas, informó Diario Uno. En este caso, el titular del Ente Portuario santafesino, Marcelo Vorobiof, aseguro que, durante el fin de semana se realizaron negociaciones con el vecino país de Bolivia, para posibilitar que el puerto de Santa Fe sea la puerta de salida de los productos de dicha Nación, hacia el Atlántico. Si bien por el momento existen ciertas trabas burocráticas para permitir la realización de este vínculo, se prevé que cerca de fin de año se solucionen.
Según detalló Vorobiof, en diálogo con LT9, "las tratativas que empezaron hace más de un año, en conjunto con las empresas exportadoras, fundamentalmente soja, y la parte política de Bolivia, para demostrarles que el puerto de Santa Fe es la alternativa más válida que tienen ellos como punto de transferencia de salida de sus mercaderías hacia el Atlántico”. “Lo más positivo de todo es que ellos también lo han entendido, incluso han hecho declaraciones públicas en las que manifiestan que están convencidos de que el puerto de Santa Fe es la puerta de salida hacia el Atlántico”, subrayó.
Indicó además que la semana pasada "se realizó un último viaje hacia ese país en el que nos recibieron y empezamos a trabajar para arribar, en un plazo no muy lejano, a una realidad. Hoy por hoy, la situación depende más de algunas consideraciones argentinas que de Bolivia porque para el trasbordo de mercadería extranjera -que sería en este caso soja- dentro de la aduana, las disposiciones no permiten hacer esa actividad dentro de los puertos que se encuentran en la zona de San Lorenzo y Rosario, pero trabajamos para que la aduana pueda extender esa disposición”.
Al ser consultado sobre los plazos que se manejan, estableció que: "En el transcurso de este año, en la medida en que podamos coordinar, durante el segundo semestre estaríamos en condiciones” de comenzar con las actividades. Además, aseveró que “el puerto está en condiciones y los bolivianos quieren usarlo”. “En la medida en que podamos solucionar alguna problemática burocrática, en el transcurso de este año podríamos estar en condiciones de aceptar parte del millón y medio de toneladas de soja que, del hermano país, baja por la hidrovía”, agregó.