La Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), realizó la segunda convención de concesionarios del sector moto vehículos en Río de Janeiro, Brasil, entre el 18 y el 21 de agosto. Asistieron casi 200 representantes de los concesionarios oficiales, de las fábricas terminales e importadores, de las entidades financieras, de compañías de seguro e instituciones de gobierno, tanto de nuestro país como de los países vecinos.
La meta es un millón de patentamientos en el futuro cercano partiendo de la existencia de un acuerdo entre las principales terminales y concesionarios para exigir una regulación que combata la competencia desleal y sabiendo que la cadena de valor de las concesionarias espera vender casi 700 mil motos durante 2011, un nuevo récord histórico. Para ello se tiene en cuenta que en los últimos cinco años la venta de motos se multiplicó por más de cuatro y, en la actualidad, se están patentando cerca de 60 mil unidades por mes.
Como en otros sectores, la expansión se fue dando a partir del crecimiento económico, la mejora del poder adquisitivo y el financiamiento, explicó en un comunicado la entidad
Para acompañar estos síntomas positivos, los integrantes del sector se plantean que deben tomarse medidas sobre asuntos pendientes como la alta informalidad y competencia desleal, la elevada presión impositiva, la rentabilidad acotada y la complicación con los costos.
Si bien en los últimos años se tomaron varias medidas que limitaron este avance, como por ejemplo la implementación hace un año de un formulario digital para la registración, que obliga a inscribir la unidad en el momento de la venta (lo que ha llevado a que hoy casi el 80 por ciento de las motos que se venden estén patentadas) reduciendo la informalidad y la competencia desleal, aún queda pendiente elaborar un reglamento para regular el mercado sobre quiénes pueden comercializar motos y quiénes tienen que fabricar, ensamblar o importar, para evitar la competencia desleal en todas las líneas de la cadena.
Funcionarios nacionales de la Superintendencia de Seguros, la Agencia Nacional de Seguridad Vial, la Dirección Nacional de la Registro de la Propiedad y la Subsecretaría de Defensa al Consumidor estuvieron presentes en la convención y pudieron tomar nota de los reclamos del sector.
Otro de los temas prioritarios que consideran los actores implicados es la disminución de la rentabilidad, pues creen, que si bien el volumen de ventas se incrementaría más de 21 por ciento (respecto a las 550 mil unidades de 2010), los márgenes se están reduciendo por dos cuestiones centrales: la presión impositiva y los problemas comerciales.
La reventa informal (sin inscripción, ni garantías) que provoca fuerte competencia desleal es otro de las asignaturas a las que apunta la propuesta de un marco regulatorio.
En Argentina hay alrededor de 200 proveedores a las concesionarias, de los cuales muy pocas son fábricas y ensambladoras (con distinto grado de integración de partes) y el resto, importadoras. Los fabricantes también se mostraron preocupados por la competencia desleal de algunas empresas que importan lotes de motos, las venden y luego desaparecen.
Finalmente hubo coincidencia en que incrementar, paulatinamente, la participación de las partes nacionales dentro del producto final implicaría que la inversión del sector se multiplicaría. La producción de moto partes es uno de los temas deficitarios. Su desarrollo es complicado porque los costos internos de la mano de obra y de los insumos nos plantean una desventaja competitiva frente a las partes de China.
