Se trata de un desalador de alta capacidad que incrementará significativamente la reducción de agua y sales del crudo que se destina a la producción de combustibles.
El flamante equipo permitirá disminuir las sales del crudo hasta 2ppm (dos partes por millón), lo que resguardará la vida útil de los equipos, optimizará el proceso de destilación e implicará una mejora en la producción de naftas.
El desalador tiene 37 metros de largo y un diámetro de 3,7 metros, y una vez instalado se prevé que comience a funcionar a mediados de 2012, con lo que mejorará la reducción de sales, de las actuales 10 ppm hasta llegar a 2 ppm
