El Volvo V60 Plug-in Hybrid cuenta con dos motores, uno turbodiésel, de 2,4 litros y cinco cilindros, que con 215 CV de potencia y un par máximo de 440 Nm se encarga de mover las ruedas delanteras asociado a una caja de cambios automática de seis velocidades, y otro eléctrico, de 70 CV, que acompañado por una batería de litio de 11.2 kWh instalada bajo el suelo del maletero, se ocupa de las ruedas traseras.
La gran diferencia de este modelo con otros híbridos es la posibilidad de recargar la batería enchufando el coche a una toma de 230V a 6, 10 o 16 amperios, en casa o en cualquier parking dotado con enchufes. La carga completa de la batería en una toma de 10 amperios nos lleva aproximadamente cuatro horas y media. Mientras se recarga la batería, existe la posibilidad de climatizar el habitáculo, con frío o calor, para que se encuentre a la temperatura deseada cuando vayamos a iniciar nuestro recorrido.
La batería se recarga también mientras se conduce. Cada vez que se presiona el pedal de freno, el sistema comienza a frenar el eje trasero, del que se encarga el motor eléctrico. La energía de freno liberada se utiliza para recargar la batería.
Al volante, se puede elegir entre tres modos de conducción pulsando unos botones del salpicadero que nos permiten disfrutar de tres tipos de comportamiento del vehículo totalmente diferenciados. En el primero de los modos, denominado ‘Pure’, se mueve utilizando únicamente la energía del motor eléctrico. Si la batería ha sido recargada utilizando el enchufe, se puede conducir en modo totalmente eléctrico durante cincuenta kilómetros.
En el modo ‘Hybrid’, seleccionado, motor turbodiésel y motor eléctrico, se consiguen cifras inferiores a los dos litros de gasóleo cada 100 km (1,9 litros concretamente) con unas emisiones de CO2 de tan sólo 49 g/km y un alcance de hasta 1.000 kilómetros sin repostar.
Si se opta por el modo ‘Power’, las mayores prestaciones disponibles en el V60 Plug-In Hybrid, con una aceleración de 0 a 100 km/h son de tan sólo 6,2 segundos. Con esta selección, el motor turbodiésel y el eléctrico ofrecen lo mejor de sí mismos para alcanzar una potencia máxima de 215 + 70 CV y un par máximo de 440 + 200 Nm.
El vehículo cuenta con una opción denominada ‘Guardar batería para más tarde’. Si se activa, el sistema se asegura de que siempre haya carga suficiente en la batería para conducir en modo totalmente eléctrico durante al menos 20 kilómetros, algo muy útil para núcleos urbanos.
El V60 Plug-in Hybrid es el primer Volvo que llega al mercado con un sistema total de información digital para el conductor. Los relojes de agujas convencionales del velocímetro o el cuentarrevoluciones han sido sustituidos por una pantalla LED que ofrece multitud de opciones. El conductor puede elegir qué información quiere recibir a través de la pantalla en todo momento.
También es posible comunicarse con el coche a través de una aplicación para móvil. Esto permite al conductor acceder a funciones como la climatización o recordar si se ha dejado conectado el coche a la red eléctrica. Su precio será de aproximadamente 57.000 euros.
