Las principales recomendaciones son:
Ingreso al vehículo: debe ser lento y procurando no golpearse.
Cinturón de seguridad: Una vez sentada, se debe colocar el cinturón de seguridad de manera correcta, es decir, por debajo de la panza, en la zona de las caderas (nunca cruzar la panza con el cinturón) y por el medio del pecho, no por debajo del brazo, más allá de que se pueda arrugar la vestimenta o hasta resultar algo incómodo.
Postura: se recomienda ubicar la butaca lo más atrás posible para obtener una cómoda posición de manejo. Finalmente, hay que ajustar la columna de dirección (en altura y profundidad) y la posición del asiento, tratando de mantener una distancia mínima de 20 cm, aproximadamente, con respecto al volante de la panza de la embarazada.
Acompañantes: Por otra parte es recomendable que las embarazadas que viajan como acompañantes lo hagan en el asiento trasero, con el cinturón de seguridad correctamente trazado.
Calzado: Otra recomendación que va mas allá de estar embarazada o no, es tratar de no manejar con zapatos de taco, ya que es habitual ver accidentes causados porque el taco impide pasar del pedal del acelerador al freno o viceversa. Es recomendable llevar un calzado más cómodo o intercambiarlo al momento de manejar.