El ministro de Producción, Ciencia y Tecnología, Cristian Breitenstein, aseguró que el gobernador Daniel Scioli ha pedido “una agresividad bien entendida” para enfrentar la crisis económica mundial.
Breitenstein, el ministro que dejó la intendencia de Bahía Blanca para dedicarse de lleno a la gestión con empresarios, científicos y con todos los sectores productivos, detalla cuáles son los pasos para enfrentar los vaivenes de la economía global y anuncia que tiene planificado participar de misiones comerciales internacionales para promocionar a las empresas locales.
¿Cómo influye la crisis internacional en la Provincia?
La crisis está, hay una desaceleración a nivel global en distintas regiones. Argentina no está afuera de ese escenario y la provincia de Buenos Aires es el 50 por ciento del motor industrial de Argentina, el 40 por ciento del motor productivo y tiene la responsabilidad de generar un tercio de las exportaciones nacionales, por lo cual 1 de cada 3 dólares en divisas que entra Argentina los genera el sistema productivo de la Provincia.
Por eso el gobernador nos ha pedido una agresividad bien entendida en materia internacional, salir al mundo en misiones comerciales acompañando a los empresarios para que la única forma de limitar o mejorar la balanza comercial no sea solamente las restricciones a las importaciones sino que sea la exportación.
Por eso estamos enfatizando mucho este aspecto. Fuimos con el gobernador a Venezuela, el 22 de agosto iniciamos una misión comercial a Chile, en septiembre hay una misión comercial a Alemania. Me parece que en toda crisis hay desafíos, hay que saber detectarlos y estamos en muy buenas condiciones para cumplirlos.
¿Se está reuniendo con empresarios?
La gestión es una gestión público – privada, no es una gestión donde el Estado dice lo que hay que hacer y el resto acompaña. Por el contrario, es el sistema privado el que sostiene la producción, el 70 por ciento de los recursos provinciales para educación, justicia, salud y seguridad, surgen del sector privado, del sistema productivo de la Provincia.
Entonces hay que cuidarlo y esto implica escucharlos, atender su problemática, corregir, ver cómo motivamos para producir más, para mantener el empleo, y más en las crisis. Estamos atentos a qué industrias pueden correr algún tipo de peligro, donde pueden perder mercado, cómo recomponerlos o sustituirlos por otros mercados, cómo adaptarse al proceso de sustitución de importaciones que vino para quedarse en Argentina, y en diálogo con todas las cámaras, la UIPBA, la Confederación Económica, FEBA, y con la UIA por el impacto que tiene la provincia en la Nación.
¿Qué significa entonces el buque Eva Perón en este contexto?
Es uno de los barcos de mayores portes que en las últimas tres décadas Argentina ha botado, ha lanzado al mar, y es un orgullo no solamente el barco sino para la industria naval argentina y para astilleros en particular. Astillero lleva casi más de 60 años en la industria naval argentina, con barcos como la Fragata Libertad y numerosos barcos a nivel productivo que han podido desarrollarse, que están realizando una tarea muy importante en una cogestión entre trabajadores y el Estado, y donde hemos vivido momentos difíciles. Astillero no estuvo al margen de las situaciones de Argentina, en la década del 90 se planteó un severo ajuste, con riesgo de la fuente de empleo, y el compromiso para con los trabajadores ha hecho de este lugar una gran familia nuevamente.
No solamente se está pensando en mejorar la productividad sino también en darle dignidad a los trabajadores a través de un comedor y una guardería para casi 400 familias que integran ese grupo y de las cuales un grupo menor son mujeres trabajando en este ámbito que necesitan un espacio para sus hijos.
Al terminar sus palabras, un grupo de trabajadores del Astillero se acercan a saludar al ministro. Hablan con él sobre el funcionamiento del jardín de infantes, la propuesta educativa se sumará a la de la Escuela Técnica que funciona en el Astillero, y que se completa con el Instituto Superior de Formación Técnica Nº193.
Unos tres mil trabajadores participaron de la construcción del buque petrolero Eva Perón. Es uno de las producciones que se realizan en el Astillero Río Santiago, donde también se efectúan reparaciones de barcos de menor porte y se está comenzando con la base del Juana Azurduy, otro de los buques que comprará la República Bolivariana de Venezuela para transportar petróleo.
