Moreno "me dijo que tanto yo como Echegaray nos manejábamos fuera de la ley y que él estaba cansado de las empresas fantasmas brasileñas y uruguayas", dijo la mujer sobre la reunión mantenida en el despacho del funcionario. En declaraciones a las radios Mitre y Diez, la despachante consideró que Moreno "no le debe tener respeto a la madre. Para tratar así a las mujeres, te tiene que importar muy poco quién te parió".
"Hice la denuncia el viernes a la mañana en la Fiscalía 4 (a cargo de Carlos Stornelli). La hice porque todos sabemos cómo trata a la gente y cómo son sus amenazas, pero si no, no pasa nada. Si todos nos animamos a contar y denunciar lo que nos pasó, puede llegar a haber un camino", aseguró De Conto.
"No entendía tanta falta de respeto. No sabía por qué me había llamado y me seguía gritando”
El incidente comenzó hace diez días cuando la despachante de Aduana recibió un llamado de Moreno, en persona, a su celular: "Se presentó como Guillermo Moreno y empezó a gritar que me callara la boca, que él iba a hablar y que después me iba a cortar pero que lo escuchara". Y agregó que "no entendía tanta falta de respeto. No sabía por qué me había llamado y me seguía gritando. Después me comentó que me llamaba porque yo trabajaba para una empresa fantasma. Es una empresa brasileña, muy grande en Brasil, que acá está instalada hace once años o doce. Yo soy despachante de Aduana de esa empresa".
Según De Conto, "la Secretaría del Interior de Brasil lo había llamado a Moreno para que le diera explicaciones sobre por qué no autorizaba el permiso para importar (a una compañía que produce teléfonos de línea). Evidentemente, como no se pudo descargar con la gente de Brasil, lo más a mano que tuvo fue el despachante, que soy yo".
Luego de recibir una citación de parte de Moreno, De Conto y otras dos mujeres, ambas representantes de la compañía telefónica brasileña, acudieron el jueves pasado al despacho del secretario de Comercio. "Eramos tres mujeres. No nos dio derecho a nada. Nos dijo 'se sientan ahí'. Cuando entramos, me dice 'usted se calla la boca porque con usted ya hablé el viernes'. Le dije que no me iba a callar, que había ido para que él me pidiera las disculpas del caso", relató.
De Conto insistió con que "me había amenazado con que no iba a poder trabajar más, que me hablaba en esos términos pero la próxima vez iban a ser otros. Le pregunté cuáles eran esos términos. Siguió gritando que me callara, que llamaran al centro de despachantes, que quería hablar con el presidente".
"A mí me echó, me dijo que me fuera", manifestó, y precisó que, antes de salir, le dijo a Moreno que le daba "asco como persona, como funcionario, como ciudadano. Que no estaba dispuesta a seguir escuchándolo. Entró una persona de seguridad que me acompañó hasta la salida".
El incidente ocurrió a menos de una semana de que la titular de ADECUA, Sandra González, denunciara que fue echada a los gritos por Moreno de una reunión con asociaciones de consumidores.
