Luego de un largo silencio mediático, Juan Pablo Schiavi defendió hoy en radio Vorterix su gestión, y dijo: “creo que hay una necesidad de buscar responsables, no voy a escapar a mi responsabilidad”. Además aclaró: “puse la cara al día siguiente de la tragedia, era parte de mi responsabilidad”, a la vez que aseguró que no se arrepiente de haber asumido el cargo de funcionario que ejercía en el momento del accidente. “El sistema de hombre muerto estaba desconectado”, sugirió.
Sobre el contrato de consesión, el ex funcionario dijo que “tiene 17 años en función de un pliego que retribuía con las tarifas y el Estado controlaba el servicio por la calidad de prestación. No controlábamos si dos pesos se gastaban en rulemanes, sino si el tren salía temprano y los vidrios estaban rotos”. Y detalló: “este contrato ha tenido muchas penalidades, desde 1996. 2009, 2010 y 2011 son los años con más penalidades”.
Por último, Schiavi en referenica al asesinato de Leandro Andrada, el motorman que entregó la formación a su compañero Marcos Córdoba en el tramo anterior del accidente, dijo: “no es menor que el último chofer en manejar ese tren, que entregó la formación, haya sido asesinado”.