El funcionario anunció que el Ministerio de Trabajo convocó para esta tarde a los delegados de los empleados, quienes insisten con que el uso de las máquinas provoca "dolencias" como la tendinitis por la posición en la que están instaladas.
Schiavi admitió que la ubicación de los aparatos provoca a los trabajadores a realizar un perjudicial "movimiento de subir el dedo" para concretar la recarga, que "es el que genera la tendinitis", al tiempo que dijo que las máquinas serán relocalizadas "en 30 días". Y aseguró que "no vamos a tolerar presiones".
El aparato para recargar la tarjeta SUBE en los subterraneos se encuentra a “la altura de los ojos” dijo Schiavi y agregó que "como se armó este lío, nosotros nos sentamos con la concesionaria y dijimos: '¿Cómo arreglamos esto'?. En 30 días, todas las maquinitas no van a estar más arriba". Auqnue luego sostuvo que los delegados de la línea B del subte "no pueden esperar 30 días, éste es el problema de hoy". Entonces, yo creo que detrás de esto no está el problema de la tendinitis, debe haber otro problema de reclamo", consideró.
