La iniciativa fue elaborada y propuesta, en forma conjunta, por el Foro Ambiental Córdoba, el Colectivo por el Bosque Nativo, el Grupo Intercuencas Sostenibles y el Núcleo Diversus de Investigaciones en Diversidad y Sustentabilidad.
Los ambientalistas, mediante un informe técnico presentado al Gobierno local, sostienen que para solucionar los problemas de falta de visibilidad en las rutas, es necesario trabajar en la “conservación y recuperación de bosques nativos”, al igual que el “adecuado manejo de los suelos y la implantación de barreras forestales protectoras en los establecimientos agrícolas”.
En ese sentido sostienen que la tierra no retenida en suelos cultivables bajo ciertas condiciones climáticas es arrastrada por el viento, luego se convierten en polvo en suspensión y generan serios riesgos para el tráfico vehicular, sumado al daño ambiental.
Con el objetivo de contrarrestar la situación ambiental y reducir el índice de accidentes causados por las tormentas, las organizaciones ambientales proponen la implantación de barreras forestales, con especies predominantemente nativas, para amortiguar la fuerza del viento y garantizar la visibilidad que es constantemente amenazada por el polvo de tierra.
Otro de los puntos del proyecto contempla la instalación de un radar meteorológico Doppler de uso meteorológico, y la creación de un `protocolo de emergencias médicas` ante accidentes de tránsito con múltiples víctimas, en donde consideran que deben intervenir personal capacitado de la Policía, Defensa Civil, Bomberos, Vialidad y el Servicio Meteorológico Nacional.
La propuesta se realizó ante el Gobierno provincial, las delegaciones locales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) y Vialidad Nacional.
