Prestige Auto, empresa de Open Cars S.A., inició formalmente sus operaciones en Argentina tras completar el proceso de transición iniciado en febrero, y asumió la representación de Mercedes-Benz en el país. La compañía tomó a su cargo la fabricación nacional de la Sprinter, así como la importación, distribución, comercialización y servicio posventa de todos los vehículos de la marca a través de su red de concesionarios.
La compañía aseguró la continuidad laboral de los 1800 empleados de la planta y firmó un acuerdo inicial para extender la producción local de la Sprinter hasta 2030, con la posibilidad de ampliar ese plazo y desarrollar nuevos proyectos productivos para la marca alemana.
Prestige Auto también anunció un plan para aumentar los volúmenes de producción y exportación de la planta ubicada en Virrey del Pino, junto con la ampliación de la oferta de vehículos importados, que se duplicará este año. En el corto plazo, la producción de Sprinter pasará de 14 mil a 17 mil unidades anuales, un incremento del 20 %, mientras que las importaciones pasarán de 1500 a 3 mil unidades.
El evento inaugural se realizó en el Centro Industrial Juan Manuel Fangio de Virrey del Pino, con la participación de los empleados, representantes de los sindicatos SMATA y APS, accionistas y miembros del directorio.
Daniel Herrero, CEO de Prestige Auto, declaró: “Estamos muy entusiasmados con esta nueva etapa de Prestige Auto, un proyecto industrial argentino que desea ser parte del desarrollo y crecimiento de la industria automotriz de nuestro país. Queremos agradecer especialmente a nuestros empleados, sindicatos, proveedores y concesionarios por su apoyo durante la transición”.
Herrero también confirmó que el aumento de la producción permitirá ampliar tanto el abastecimiento del mercado interno como las exportaciones, que hoy representan el 60 % del volumen total. Además, aseguró: “La calidad será nuestra máxima prioridad. La casa matriz de Mercedes-Benz auditará los vehículos para garantizar los estándares globales. El objetivo es seguir diversificando los destinos de exportación”.
Prestige Auto se presentó como una plataforma innovadora enfocada en electrificación, innovación, conectividad y sustentabilidad. La compañía invirtió inicialmente US$100 millones para optimizar los procesos productivos, ampliar el Training Center de Malvinas Argentinas y expandir su oferta de vehículos. Actualmente, genera empleo indirecto para unas 15.000 personas, incluyendo concesionarios, talleres, proveedores y carroceros.
El directorio de Prestige Auto quedó conformado por Daniel Herrero como CEO y Alfonso Prat-Gay como vicepresidente, acompañados por Federico Sosa (Administración), Santiago Palay (Estrategia), Pedro Moreno (IT), Daniel Valeggia (Manufactura), Manuel Mantilla (Comercial de Autos y Vans), Christian Kimelman (Finanzas), Deborah Luchetta (Legales) y Diego Tyburec (Recursos Humanos).
