17.7 C
Buenos Aires

Polémica por sistema de datos biométricos en aeropuertos estadounidenses

MÁS NOTICIAS

El estudio publicado hoy por el centro de estudios sobre privacidad y tecnología de esa universidad describe la "incómoda" situación a la que se ven enfrentados los pasajeros internacionales en nueve terminales aéreas cuándo deben detenerse "ante una sofisticada cámara" que compara el rostro "de cada viajero con la base de datos biométricos del DHS". "Es injustificado, es legalmente enfermo, técnicamente defectuoso y puede implicar serios riesgos respecto de la privacidad", señala el documento respecto del programa que "no fue justificado debidamente por el DHS o por el Congreso pero que tuvo un costo de 1.000 millones de dólares".

Un primer señalamiento legal radica en que los Estados Unidos, luego de los atentados de septiembre de 2001, alientan la recolección de datos biométricos de extranjeros pero nunca autorizó la misma operación respecto de los ciudadanos norteamericanos y "sin autorización explícita, el DHS debería evitar hacerlo"."El programa representa una seria escalada del escaneo biométrico de los ciudadanos y no hay normas que lo regulen", destacan los especialistas. Sin embargo, una de las principales objeciones radica en la utilidad y efectividad del programa: "Complicando las cosas, la tecnología usada por el DHS comete frecuentes errores, rechazando a 1 de 25 viajeros con credenciales válidas. Esto significó que 1.632 pasajeros fueron demorados cada día en el aeropuerto JFK de Nueva York".

 

Las fallas en el sistema podrían estar delatando que las personas que son demoradas de forma errónea sufren esa situación por su rasgos físicos asociables a una etnia o raza extranjera o por su género. "Personas inocentes pueden ser sacadas de la línea de embarque como resultado de su complexión física o su género", afirma el estudio. Por otra parte, los expertos en derecho se preguntaron sobre los riesgos que implicaría que "esta tecnología fuera usada para identificar, por ejemplo, manifestantes" dentro del país y recomendaron a la DHS "adoptar una política pública para asegurar que la colección de estos datos no se usarán para otros propósitos". Finalmente, "cualquier resultado que indique que el algoritmo trabaja de manera diferente al basarse en la raza o el género del pasajero es inaceptable y debe corregirse antes de su aplicación", concluyeron.

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img