Miguel Ángel Mancera, jefe del Gobierno de la Ciudad de México, anunció hoy medidas para mitigar los efectos del alza de hasta el 20 por ciento en los precios de los combustibles y dispuso que los vehículos de funcionarios de la capital dejen de circular durante un día a la semana.
Con la idea de evitar un traslado generalizado del aumento a otros precios, Mancera preparó un acuerdo entre empresarios y proveedores y criticó la falta de medidas concretas contra este aumento en el acuerdo gubernamental impulsado por el presidente Enrique Peña Nieto.
Una de las primeras medidas es que 1.500 vehículos de los servidores públicos del Gobierno capitalino, excepto los que realizan funciones de seguridad, rescate u operativas, dejen de circular un día a la semana.
El dinero que pueda ahorrarse con esta acción, puesto que se reduciría el consumo de combustible, "será destinado para las áreas operativas con patrullas, como son ambulancias, y todas las tareas propias operativas del Gobierno de la ciudad", afirmó Mancera.
Otra medida relacionada consiste en una reducción de 20% al consumo de combustible de los vehículos asignados a los servidores públicos que realizan tareas administrativas dentro del Gobierno.
"Esto exigirá a los servidores públicos que realicen una programación de sus recorridos y del uso del vehículo que tienen asignado", apuntó en la sede del Ejecutivo local.
Por otro lado, las personas jubiladas y adultos mayores gozarán de un descuento de 30% en el impuesto predial, y a los habitantes de 22 colonias de la delegación Iztapalapa, que tienen problemas por grietas o hundimientos, se les condonará del 50% al 100% de esta carga, de acuerdo con las afectaciones que presenten, indicó EFE.
Los aumentos en los precios de los combustibles desataron la semana pasada una oleada de protestas en todo el país, con brotes de violencia que dejaron al menos cuatro muertos y decena de detenidos.
