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La economía se reactiva, primero la obra pública

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Lo anunció el Gobierno. Luego de reuniones con empresas y sindicatos, el Presidente le dio instrucciones al ministro Gabriel Katopodis. Claves los protocolos sanitarios para transporte de trabajadores. Son 260 obras, la mayoría de Vialidad Nacional y AYSA.

Desde la Casa Rosada comienzan a dar señales que Mayo es un mes clave para los argentinos –lo es históricamente-, comienza la esperada reactivación de la economía para poco a poco ir superando la grave crisis que atraviesa el mundo debido a la pandemia provocada por el COVID-19.

El primero en salir a hablar sobre los planes del Gobierno fue Gabriel Katopodis, ministro de Obras Públicas de la Nación, que antes de detallar los planes del Presidente dejó claro que “no se aprueba ninguna obra que no nos garantice que se pueda desarrollar la movilidad de los trabajadores o que no cumpla el protocolo de salud; hay un estricto cumplimiento de los protocolos sanitarios y de movilidad“. Buen punto para salir al ruedo, en especial para calmar la ansiedad de aquellos que solo piensan en sus finanzas.

Los trabajadores viales y de la construcción escucharon con atención, no se va a poner en riesgo la salud de nadie, el ministro fue preciso, “estamos volviendo a trabajar en las grandes obras públicas del país, pero sin poner en peligro la salud de los trabajadores ni el esfuerzo que se hizo durante estas semanas” y agregó “establecimos un acuerdo con cada una de las empresas que incluye la movilidad de los trabajadores y el protocolo sanitario”.

Aval sindical

La primera en hacer declaraciones públicas fue la Secretaria General de los trabajadores de Vialidad Nacional, Graciela Aleñá, quien avaló la decisión del Gobierno Nacional, haciendo hincapié en la importancia de cuidar la vida y la salud de los trabajadores.

Graciela Aleñá, Secretaria General de STVyARA

“Los viales nacionales -a pesar de la cuarentena- nunca dejamos de trabajar, respetando y haciendo cumplir los protocolos, seguimos trabajando tanto en las tareas administrativas, como en aquellas que hacen imprescindible la presencia de los trabajadores viales en los caminos”, argumentó la dirigente sindical.

Entre las tareas de los trabajadores representados por el gremio nacional, está el corte de pasto, bacheo, recalce de banquinas, señalamiento y balanzas. “Hemos atendido en forma inmediata las emergencias que se presentan sobre todo por cuestiones climáticas y preparando todo para la reactivación de la economía argentina”.

Un sistema de tres ejes para reactivar la obra pública

En el mismo sentido, Katopodis señaló que “en los próximos sesenta días vamos a reactivar 260 obras públicas” y mientras se siguen pagando deudas heredadas de la administración anterior de más de 34.000 millones. Ante este anuncio, la reunión en Olivos despertó la expectativa de todos sus participantes: funcionarios de Obras Públicas, las conducciones de la Cámara Argentina de la Construcción, y sindicalistas del sector de la construcción. Eso sí, Alberto Fernández se mostró inflexible sobre la circulación de trabajadores en transporte público ya que es un foco de los más simples para la circulación del COVID-19.

De esas reuniones se desprendió el acuerdo para que más de 110.000 –son los empleos que se perdieron desde 2018- trabajadores vuelvan a soñar con la recuperación de su fuente laboral. El Sistema de Reactivación de la Obra Pública consta de un protocolo con 3 componentes.

Gabriel Katopodis, Ministro de Obras Públicas
Gabriel Katopodis, Ministro de Obras Públicas

El primero es el Acuerdo con las empresas que deberán cumplir con un protocolo sanitario para que se los autorice a funcionar. Luego se realizarán controles con la inspección de cada obra.

El segundo estadio del sistema tiene que ver con el Transporte Seguro ya que los trabajadores no lo harán en transporte público sino a través de transportes escolares o de línea especialmente contratados por las empresas.

El tercer punto fundamental para la Seguridad Sanitaria se deberá cumplir en la obra. Al entrar al turno se le tomará la temperatura a cada trabajador, se les proveerá barbijos y elementos de higiene. Además, un cambio fundamental en estos tiempos, se trabajará sobre el distanciamiento social, especialmente en los momentos de almuerzo y períodos de descanso.