El freno judicial en la aplicación del aumento de la tarifa del subterráneo de Buenos Aires, que debió comenzar a regir el 1° de abril último, ya le costó 124,8 millones de pesos a las arcas porteñas, en tanto que el Gobierno de la Ciudad ya presentó la apelación al último fallo judicial que impidió el aumento de 7,50 pesos a 11.
“Es una situación injusta con los vecinos de la ciudad de Buenos Aires que deben reasignar un gasto necesario en alguna partida del presupuesto, para poder cubrir lo que justamente deberían cubrir los pasajeros del subte“, indicó el presidente de Subterráneos de Buenos Aires (Sbase), Eduardo De Montmollin. Precisó que “la Ciudad debe destinar 3,2 millones de pesos extras diarios a sostener con subsidios una tarifa que desde el 1 de abril debió haber sido de 11 pesos en lugar de 7,50; lo cual hubiera significado no tener que emplear ésos recursos“.
Explicó que “los ajustes planteados en el subte son idénticos a los que se están haciendo en ferrocarriles y colectivos”, porque puntualizó que “entendemos a todo el transporte de Buenos Aires y alrededores como un único sistema“. Subrayó que “la política es recomponer las tarifas sin romper el balance entre los valores de los distintos servicios que existen”.
De Montmollin afirmó que “ya se presentó la apelación al fallo judicial“, de la jueza en lo Contencioso Administrativo Patricia López Vergara, quien basó su decisión de suspender la aplicación del aumento, en la necesidad de contar con documentación que lo justifique.
El funcionario explicó que “originalmente íbamos a celebrar una audiencia pública el 6 de marzo para tratar el aumento tarifario y un amparo judicial lo impidió“. Señaló que “luego se reprogramó la audiencia para el 19 de abril y aunque hubo un nuevo amparo, afortunadamente el juez que actuó no le hizo lugar y se pudo celebrar”.
“El paso siguiente era, habiendo cumplido todos los pasos de la ley ejecutar el aumento de tarifas a partir de ayer, pero la medida de la juez lo impidió”, indicó el presidente de Sbase, quien subrayó: “Ya elevamos una apelación y estamos remitiendo toda la información solicitada para poder corroborar la validez del cálculo de la tarifa técnica y como se establece el valor para el usuarios”.
Destacó que “la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (UBA) corroboró que la metodología usada para determinar la tarifa es válida”, y precisó que “se trata del valor técnico, que es cuánto debería costar el subte para cubrir los costos de las empresas“.
En ese sentido, afirmó que “la tarifa, con los ajustes previstos incluyendo el último escalón para julio de 12,50 pesos; los usuarios iban a cubrir el 40 por ciento anual en promedio, en tanto que el 60 por ciento restantes lo pagan los vecinos y contribuyentes de la Ciudad“.
“Lo paradójico de esto es cuánto de un servicio tiene que pagar quien lo usa y cuánto todos los contribuyentes”, sostuvo De Montmollin, quien indicó que sin aumentos “o deterioramos el servicio o hay que reasignar partidas y perjudicar a otras áreas, para hacer frente a estos costos del subte”.
