Esta noche, las fuerzas de seguridad dispersaban a los manifestantes que no tenían relación con los familiares y amigos del joven que fuera buscado durante 48 horas. Tanto dentro de la estación como en las calles aledañas, en un operativo que incluyó gases lacrimógenos y que provocó una cifra indeterminada de heridos entre los policías y los manifestantes.