El negocio llamó la atención del mercado porque Rapidao, en infraestructura, es mucho más grande que FedEx. Su nómina salarial es casi 15 veces superior: 9.000 ante 622 personas. Tras el aval del Consejo Administrativo de Defensa Económica (Cade), en septiembre, ejecutivos de las empresas revelaron que la integración tendrá que concluir dentro de entre 18 y 24 meses. En ese período la marca Rapidao saldrá al mercado.
Cuatro meses después de anunciar la venta de la empresa fundada por su familia, y tornarse presidente de FedEx Express Brasil, Américo Pereira Filho y el director comercial de Rapidao, Ricardo Araújo, que comenzará a ejercer la misma función en FedEx, contaron a Valor los planes de la empresa, que facturó más de R$ 1.000 millones en 2011.
Invertir en la capacidad de atención a los clientes del comercio electrónico y ofrecer un servicio para personas físicas son algunos de los planes, en curso. “El e-commerce crece con FedEx. A mediano plazo, incorporaremos las tecnologías de rastreo de FedEx y podremos avanzar mucho en ese negocio”, dijo Pereira Filho.
Según el empresario, el rastreo de encomiendas todavía tiene alcance limitado en Brasil. “Hoy es la unidad en la que vemos mayor potencial de crecimiento”, agregó. Antes de comprar Rapidao, FedEx, en Brasil, estaba entre las 25 operaciones globales más importantes. La empresa tenía 622 empleados, con una flota de 156 vehículos terrestres, dos aviones y 84 centros autorizados de remesas. Con el negocio, la filial brasileña pasó a ser una de las cinco más grandes del mundo. A través de Rapidao, heredó 6.000 empleados, 770 vehículos, 145 puntos de distribución y 17.000 clientes.
FedEx y Rapidao atraviesan un intenso proceso de integración.Antes de terminar esa etapa, están ofreciendo soluciones combinadas para clientes, especialmente los de mayor porte. “Desde finales de julio hasta ahora, aparecieron centenas de oportunidades de nuevos negocios. Tanto para el lado internacional como para el doméstico”, afirmó Araújo.
Según el director comercial de Rapidao, después de la adquisición, FedEx aprobó “la inversión más alta de la historia de la empresa” para la ampliación de la flota, no divulgado. Solamente el año pasado, Rapidao desembolsó R$ 17 millones para comprar 150 vehículos terrestres. “Estamos desarrollando una red específica para la persona física. Muchas veces ese cliente no está preparado para recibir. Por eso, esa es un área en que FedEx invertirá más en Brasil, en capacitación y sistemas”, afirmó Pereira Filho, que no divulgó las cifras en cuestión. Además, con el aparato de Rapidao, la empresa estadounidense pretende avanzar en el segmento conocido como “punta a punta”, por el cual no solo trae las mercancías a Brasil, sino que las distribuye en todo el territorio nacional, ganando competitividad.
Otro foco será el sector de pequeñas y medianas empresas, donde tiene clientes descontentos con el servicio. Un importador pernambucano que prefirió no revelar su nombre dijo que Rapidao es competitiva en precio, pero que pierde en agilidad con respecto a competidores más chicos.
La adecuación de los servicios para el “estándar FedEx” es justamente lo que determinará el cambio de marca de la empresa pos-adquisición. De acuerdo con Pereira Filho, adoptará el nombre de FedEx definitivamente cuando los servicios estén en línea con lo que practica la empresa estadounidense.Con la compra de Rapidao avanza en el segmento de servicios punta a punta
Fuente: El Cronista Comercial
