Integrantes del Sindicato de Camioneros de Córdoba, con Pablo Moyano a la cabeza, tomaron la playa de estacionamiento del centro de distribución que la firma supermercadista Cordiez posee en avenida La Voz del Interior, camino al aeropuerto Córdoba. El conflicto entre los camioneros y los supermercadistas recrudeció luego de que un laudo del Ministerio de Trabajo de la Nación dispusiera que los transportistas que cumplen tareas en los supermercados pertenecen a la actividad comercial y por lo tanto el sindicato al que deben pertenecer es el de la Asociación de Empleados de Comercio (Agec) encuadrados dentro del Convenio Colectivo de Trabajo 130/75, y no al Sindicato de Camioneros.
En tanto, los representantes del gremio no permiten el ingreso o egreso de mercadería de ese centro distribuidor en reclamo para que se pase a ese sindicato a un núcleo de trabajadores que hoy están en el convenio de Empleados de comercio y que forman parte de la carga y descarga de productos.
Pablo Moyano, secretario adjunto del sindicato de Camioneros, dijo en el lugar que hace unos meses, el Sindicato de camioneros de Córdoba firmó un acuerdo de traspaso de cuatro o cinco supermercados, que alcanza a 300 trabajadores de la parte de logística y el traspaso debía ser a partir del 1 de diciembre". En contrapartida, la Cámara de Supermercados de Córdoba (entidad que nuclea a las firmas Mariano Max, Cordiez, Almacor, Buenos Días) convocó a una conferencia de prensa, para esta tarde en repudio a la toma de la planta de Cordiez.
Denuncia
Por otra parte, los representantes de la Cámara de Supermercados de Córdoba formalizaron hoy una denuncia penal contra el bloqueo que lleva adelante el sindicato. "Estuvimos con la fiscal general de Córdoba (María Marta Cáceres de Bolatti) y con el ministro de Industria (Jorge Lawson), y les pedimos que solucionen esta situación que nos genera el bloqueo de nuestro centro de distribución", aseguró a Télam el presidente de la cámara de supermercadistas, Ricardo Brasca.
El dirigente, tras precisar que formularon "una denuncia penal", insistió: "es lamentable que seamos prisioneros de un problema sindical que tiene el gremio de los camioneros con los de los empleados de comercio y que perjudica a nuestras cadenas, causándonos un daño tremendo a nosotros y a 3.500 trabajadores".
Brasca destacó que el bloqueo debe resolverse lo antes posible, porque, "teniendo en cuenta la Semana Santa, las cámaras refrigerantes (de los supermercados) están abarrotadas de pescado y de mercadería perecedera que tendría que tirarse si no se consume hasta el miércoles".
