Gustavo Gaona, vocero de la Cámara Empresaria de Buses de Larga Distancia (Celadi) manifestó su preocupación por la competencia desleal. Sin embargo, celebra el crecimiento del sector aerocomercial, aunque pide celeridad para cambiar regulaciones que le permitan a las compañías de micros mejorar en precio y bajar costos.
Desde la cámara que agrupa a los empresarios destacaron que acercaron varias propuestas al Gobierno pero no tuvieron respuestas
Luego de que el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich anunciara la eliminación de la tarifa mínima para los pasajes aéreos de cabotaje, desde la Cámara de las empresas de micros manifestaron su preocupación por la falta de facilidades que les otorga el Gobierno: Venimos pidiendo al Estado que se produzcan cambios en nuestras normas para poder adaptarnos a esta realidad y también mejorar nuestra situación económica, nuestros costos y el valor del boleto, clave para los pasajeros”, dijo Gaona.
Sin embargo, las empresas no se pronunciaron en contra del crecimiento del sector aéreo: “No nos oponemos al desarrollo del transporte aerocomercial. Entendemos que todas las modalidades deben funcionar, con el avión y el tren conformamos un complejo sistema de transporte”, añadió. “Es una situación muy compleja la que está viviendo la actividad. No nos oponemos al desarrollo del transporte aerocomercial; entendemos que todas las modalidades deben funcionar, con el avión y el tren conformamos un complejo sistema de transporte” en declaraciones a la radio 990. El vocero destacó que acercaron varias propuestas al Gobierno para que su actividad tenga mejoras competitivas, pero que las respuestas “se dilatan”.
El reclamo tiene que ver con la celeridad de las regulaciones para un sector y otro, que es desparejo, según las empresas: “Los cambios que necesitan nuestros primos del avión se producen a velocidad astronómica mientras nosotros, en tanto, nos estamos muriendo. Cuando se muere el ómnibus son cientos de destinos que van a quedar desconectados”, advirtió el vocero.
Celadi se enteró de la nueva medida a través de los medios de comunicación y no saben cómo afectará aún su propia banda tarifaria. De todos modos, Gaona dijo que el pasaje de avión es más barato sólo en los casos en los que se compra con anticipación. “A diferencia del transporte aéreo, que muchas lo están negociando, no tenemos ningún tipo de subsidio. Otorgamos dos millones de pasajes gratuitos al año para discapacitados, que el Estado compensa en una parte muy chica. Se nos castiga con pasajes con precios de hora pico, cuando somos un servicio público. No pedimos que el Estado se haga cargo de las empresas, sino tener herramientas para poder ser una opción para pasajeros”, reclamó.
A pesar de la competencia desleal, desde Celadi concluyeron: “El avión y el micro no es un Boca-River, es una selección nacional, pero el problema es cuando el técnico pone las fichas en un solo jugador. El transporte aéreo conecta entre 40 y 50 destinos y los micros de larga distancia conectan 1.600 destinos. Pero no todos tenemos las mismas obligaciones; el avión solo viaja a los destinos que son rentables”, señaló Gaona, y destacó que el ómnibus cumple una función social muy importante al conectar pueblos y ciudades a los que no llegan otros medios de transporte.
