La estación aérea operaba desde el 17 de setiembre pasado luego de haber permanecido casi cien días cerrada por la presencia de cenizas provenientes del volcán chileno Puyehue.
De todas formas la actividad aérea que se registraba en el aeropuerto era escasa dado que las compañías no se arriesgaban a volar a Bariloche por el temor de que algún avión quede varado allí por varios días a raíz de las condiciones climáticas.
Los fuertes vientos del oeste volvieron hoy a castigar a Bariloche y su zona aledaña al producir el levantamiento de la ceniza acumulada en el suelo y al borde de las rutas, por lo que Vialidad Nacional debió cerrar las rutas 40, 231 y 237, que unen a esta ciudad con la provincia de Neuquén.
Tanto en Bariloche como en Villa la Angostura y piedra del Aguila hay unos 500 vehículos esperando poder cruzar por las rutas, cerradas por la casi nula visibilidad.
El Servicio Meteorológico pronosticó que los vientos continuarán durante lo que queda de la jornada y mañana y que recién disminuirán por la noche con un leve ascenso de la temperatura.
