La protesta provoca trastornos en las líneas 5, 6, 7, 8, 9, 10, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 79, 84, 91, 99, 101, 106, 107, 108, 117, 130, 135, 146, 150, 161, 164, 168, 177 y 188, entre otras.
La medida afecta el servicio del Grupo DOTA. Lo impulsan los opositores a la conducción de la UTA que protestan “contra la precarización”. La cúpula gremial desconoció la protesta y la atribuyó a “intereses empresariales”.