La línea ferroviaria Sarmiento, que une la terminal porteña de Once con Moreno, funcionaba esta mañana con demoras de hasta 30 minutos, en el tercer día de quite de colaboración del Cuerpo de Delegados de la seccional Haedo que comenzó el lunes y planean extender hasta el martes próximo. En medio de esta protesta que perjudica a miles de usuarios, el gobierno puso a disposición de los pasajeros 160 colectivos para garantizar el traslado.
Los trabajadores reclaman un 40 por ciento de incremento salarial y el pago de una indemnización por el traspaso de la línea al Estado, el punto que suscita mayor tensión entre los ferroviarios dirigidos por Rubén “Pollo” Sobrero y el Ministerio del Interior y Transporte, a cargo de la línea ferroviaria desde 2012.
"Llámenlo como quieran: indemnización, resarcimiento, gratificación. Si se decide eso, yo me voy. Cómo vamos a pagar una indemnización a personas que no perdieron su trabajo. No se puede hacer lo que no corresponde. No voy a hacer nada que no se pueda explicar públicamente", lanzó ayer el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo durante el acto en el que recibió 36 nuevos coches destinados al Sarmiento.
El funcionario señaló directamente a Rubén "Pollo" Sobrero, delegado sindical de la línea Sarmiento, al que llamó "un extorsionador que está haciendo un reclamo que a él le implica recibir 300 mil pesos, y que no corresponde porque se mantuvieron todas las condiciones de trabajo, antigüedad y derechos adquiridos".
En este marco de conflicto, que no tampoco resolverse en el marco regulativo durante la reunión convocada el lunes por el Ministerio de Trabajo, ayer trascendió un video de una asamblea de trabajadores del 7 de mayo, en la que el delegado sindical de la agrupación “Lista Bordó” manifestaba: “les pido que reflexionemos, porque lo que creemos que necesitamos es un plan de lucha: golpear, golpear, golpear, hasta que los podamos poner de rodillas”, en clara alusión a la empresa estatal que administra los trenes y a las autoridades del Ministerio del Interior y Transporte.
Por otra parte, en el mismo video, se escucha como el dirigente gremial anticipa que la segunda etapa del plan incluirá un paro por 24 horas antes de fin de mes. “El día 20 las dos últimas horas del turno mañana y las dos primeras horas del turno tarde, exceptuando los guardias que tienen que manejar los coches, el resto nos vamos todos a Once y ahí decretamos el paro de 24 horas para antes de fin de mes”, les adelantaba el jefe del cuerpo de delegados de la línea Sarmiento a un reducido grupo de trabajadores.
Luego de conocerse ese material, Randazzo calificó como "una locura" la medida gremial y dijo que los principales perjudicados "son los usuarios, a los que se les está jodiendo la vida", al recibir 36 nuevos coches para esa línea. El funcionario cuestionó que la protesta se realice "en el mismo momento en que estamos llevando un proceso de modernización de los ferrocarriles", y advirtió que el Estado "no va a acceder a una demanda que no corresponde".
"En el Sarmiento hay 320 empleados que llevan 49 días de paro pese a que ganan en promedio 20 mil pesos; y en un año en que por decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se está invirtiendo como nunca en renovar el servicio", indicó Randazzo.
"¿Cómo le explico a los argentinos que le pagué un premio por supuesta productividad a un grupo de sindicalistas que lleva más de 127 mil horas de paro en cuatro meses?, de ninguna manera", dijo el ministro. "El conflicto -insistió- es un disparate y es de una actitud absolutamente irresponsable de parte de (los delegados) Sobrero y (Edgardo) Reynoso, que son los que encabezan este reclamo", agregó. "Le están jodiendo la vida a la gente en un momento en el cual deberían acompañarnos en este proceso de transformación que está a la vista y cuando se está a 90 días de tener una línea totalmente renovada", apuntó en relación al tren Sarmiento.
Repudio del oficialismo
Referentes del oficialismo repudiaron las medidas de fuerza llevadas a cabo por Sobrero en el ramal. Fue el caso de la titular del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria (FpV), Juliana Di Tullio, quien afirmó que con esta protesta los delegados de esa línea de trenes "le hacen la vida imposible al pueblo trabajador".
Mientras que los intendentes bonaerenses también se sumaron al repudio de la medida. El jefe comunal de Tres de Febrero, Hugo Curto, consideró que el reclamo por el pago de indemnizaciones "no corresponde". "Es una medida incomprensible que hagan un paro cuando los trenes son un ejemplo", dijo Curto en declaraciones a Télam. "Esto es en realidad un problema político de la parte sindical, que no tienen derecho a un reclamo de estas características", dijo Curto, para quien el gremio "quiere mantener activa una discusión en la que perjudican a millones de personas que viajan".
Por su parte, el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, afirmó que los empleados de la línea Sarmiento "son los que deberían, más que ninguno, cuidar" los puestos de trabajo y las mejoras implementadas por el gobierno. El jefe comunal apuntó directamente contra Sobrero, a quien acusó de no ser un "buen dirigente gremial", que "está siempre en contra del trabajo".